año 1924
Óleo/ Lienzo
76,5 x 100 cm
Óleo que recrea una escena íntima en el interior de una habitación donde aparecen la abuela materna del artista y la prima del pintor, Eugenia Torres Grueso. La abuela Alejandra está sentada haciendo punto mientras que a su izquierda, también sentada y con una muñeca entre sus manos, la pequeña contempla atenta el movimiento de sus manos.
Por la ventana de la derecha se filtra la única fuente de luz de la obra que envuelve suavemente las figuras y, también en menor medida, a los elementos del fondo como el sofá y la máquina de coser semitapada por una tela, que quedan prácticamente en la penumbra. Para ello el pintor emplea una paleta menos luminosa de lo que será la marca de identidad de su posterior obra.
Esta obra sería una de las más admiradas de esta época por el entonces profesor de Dibujo del Instituto de Enseñanza Media de Ciudad Real, Ángel Andrade, quien la seleccionó junto a otras obras para la exposición de Bellas Artes celebrada en Tomelloso en 1924.
La obra está firmada en la esquina inferior derecha como «A. López Torres -1924-».
Donado por Eulalia y Carmen López Torres.
- 1924, Exposición Nacional de Bellas Artes, Tomelloso
- 1995, «Antonio López Torres, pinturas y dibujos», Centro de Arte Moderno Ciudad de Oviedo (CAMCO)
- 2002, «Exposición antológica Antonio López Torres».
- Itinerancia: Centro Cultural de la Villa, Madrid; Museo Vitorio Macho, Toledo; Centro Cultural de Casa Castilla-La Mancha, Albacete; Casa Museo Zavala, Cuenca y Museo Antonio López Torres, Tomelloso.